¿serán acaso felices los muertos
allí metidos en el profundo agujero
solos, tiesos, olvidados
rodeados de absoluta oscuridad
aburridos, desesperanzados, hechos de
golpe a un lado apenas se les fue el color;
sin facebook, sin porno, sin café
asfixiados, constreñidos entre las angostas
paredes de un simple cajón,
asediados quizá por el recuerdo
de un amor truncado, una venganza que no
tuvieron ya tiempo de llegar a concluir
o la sospecha de no haber muerto cuando les tocaba
y haber sido tal vez ayudados a emigrar
al más allá por alguien a quien estorbaban
-el marido de la amante, la propia esposa
un amigo traicionado, el hermano descontento
con su parte de una herencia familiar-?
¿o serán acaso infelices pero no lo suficiente
para interesarse por buscar la manera
de abandonar la tumba y reintegrarse a la vida
y preferir de plano permanecer donde están
sin hacer nunca siquiera el exiguo esfuerzo
de mover un brazo para ver si la tapa
del ataúd se levanta y a lo mejor se abre
y la tierra allí afuera esté quizás floja
y bastara por tanto con escarbar un poco
para horadar una vía de acceso al exterior
y por allí gritar ¡sáquenme de este puto agujero!
y que viniera alguien a echar una mano
y lo librase a uno de la tierra tan húmeda
y pegajosa y llena de animales babosos ?
¿o será tan sólo que mientras vivieron
fue tan amarga su vida, y tormentosa y triste
que morirse habrá resultado ser en realidad
algo así como el milagro que ya no esperaban,
y la muerte un regalo y estar allí encajonados
dos metros bajo tierra les resultará en contraste
una especie de incomparable paraíso, un oasis
de gozo inaudito, una fiesta, un éxtasis
y el hecho de ser un cadáver lo mejor que nunca
les llegó a pasar en el transcurso de su puta vida?
¿y no será la muerte lo que en realidad busca uno
-su perfecto diamante, su caricia de niebla-
cada vez que persigue la felicidad, sin
obtener finalmente nada excepto
otro poco más de frustración, un nuevo desencanto,
y en el mejor de los casos solo el temporal alivio
-y ese deseo abrumador de dormirse (no; de morirse no)-
que nos entra luego de echar un buen palo?
A mi me entran muchos deseos de dormir cuando estoy despierta jajajaja. Ay dios :(
ResponderEliminaryo no sabría si morir de asco o subir por las paredes
ResponderEliminary subir y subir y subir por las paredes
y entra en tu habitación
por ver el dormir que tienes
eso lo canta la copla jotera.
Me subo por las paredes de rabia!!!