bicicleta de montaña witgenstein x900 para dama, con marco de aluminio y faros antiniebla
⭐⭐⭐⭐⭐
voy a ponerlos en antecedentes
actualmente tengo 48 años
fumo como un puto carretero y los fines de semana
me instalo en el sofá y me dedico a vaciar latas de cerveza
mientras miro en la tele las increíbles hazañas destinadas a los anales de la inmortalidad
de tipos que ganan un puto millón al mes por darle a una jodida pelota
como encargado de intendencia en la roseville high school
lo tengo crudo para llegar a fin de mes:
la letra del nuevo mazda de helen
los 300 dólares mensuales de la hipoteca
el pago mínimo por intereses de deuda acumulada de la mastercard
-el puto loquero le recomendó a helen
comprar zapatos y bolsos para compensar su anorgasmia-
"si mi vagina no fuera para ti más que un simple agujero
donde metes tu cosa y te vacías en dos minutos
no necesitaría la puta terapia ni comprar toda esa mierda de luigi vuton"
así estaban las cosas hasta hará unos seis meses
fue entonces cuando tuve mi momento epifánico
era sábado y había recordado
que debía comprar una nueva mesita de noche para el cuarto de invitados
ante la ya próxima visita que lavieja bruja madre de helen
nos haría para la cena del thanksgiving day
así que entré en la página de amazon
y me puse a buscar alguna puta mesita de noche
de menos de 50 dólares y que combinara con el estilo luis 19 tardío
del resto del fucking mobiliario del cuarto dela horrible arpía mi adorada madre política
dado que subirme a una bicicleta, según podrán figurarse,
ocupa el último lugar en mi lista de prioridades
todavía es hora que no consigo explicarme
cómo acabé metido en la sección de comentarios de la witgenstein x900...
"una puta mierda, no la compres"
decía belinda citrone, de augusta, georgia
"me subí a la witgenstein x900 y anduve recorriendo en ella algunas cuadras de mi barrio;
el viento acariciaba mi rostro y despertaba en mi interior
evocativas y placenteras ensoñaciones de una infancia feliz ya medio olvidada
en que el sexo y sus miserias todavía ni siquiera despuntaban en el horizonte de mi vida;
entonces la llanta delantera se desprendió de la tijera de la puta bicicleta
y yo acabé precipitándome a tierra y despatarrada en la cuneta
enseñando las putas bragas y en medio de las risas y gestos de burla de algunos paseantes"
se lamentaba shirley firestone, de miami, florida
había más de 200 reseñas negativas
y la gran mayoría coincidía en resaltar el mismo defecto:
a la puta bicicleta se le salía la llanta delantera
en cuanto el vehículo alcanzaba las 30 millas por hora
al final no compré la mesita de noche
sino que encargué una witgenstein x900
y luego contraté una cobertura adicional para el seguro de helen
por 200 mil dólares en caso de accidente en vehículo de dos ruedas
"oh, joe, hace tanto que no me subo a una bicicleta
¿crees tú que podré recordar cómo se maneja una cosa de estas?"
"claro, helen, sólo es cuestión de subirte al sillín y dejarte ir,
y no olvides aplicar el freno al final de la cuesta, justo antes de tomar aquella peligrosa curva,
para que no vayas a despeñarte por el profundo barranco de 800 metros que hay más allá"
ahora quizás ya puedan imaginarse por qué le di ⭐⭐⭐⭐⭐ a esta mierda
el único cliente que ha quedado totalmente satisfecho con su compra
me instalo en el sofá y me dedico a vaciar latas de cerveza
mientras miro en la tele las increíbles hazañas destinadas a los anales de la inmortalidad
de tipos que ganan un puto millón al mes por darle a una jodida pelota
como encargado de intendencia en la roseville high school
lo tengo crudo para llegar a fin de mes:
la letra del nuevo mazda de helen
los 300 dólares mensuales de la hipoteca
el pago mínimo por intereses de deuda acumulada de la mastercard
-el puto loquero le recomendó a helen
comprar zapatos y bolsos para compensar su anorgasmia-
"si mi vagina no fuera para ti más que un simple agujero
donde metes tu cosa y te vacías en dos minutos
no necesitaría la puta terapia ni comprar toda esa mierda de luigi vuton"
así estaban las cosas hasta hará unos seis meses
fue entonces cuando tuve mi momento epifánico
era sábado y había recordado
que debía comprar una nueva mesita de noche para el cuarto de invitados
ante la ya próxima visita que la
nos haría para la cena del thanksgiving day
así que entré en la página de amazon
y me puse a buscar alguna puta mesita de noche
de menos de 50 dólares y que combinara con el estilo luis 19 tardío
del resto del fucking mobiliario del cuarto de
dado que subirme a una bicicleta, según podrán figurarse,
ocupa el último lugar en mi lista de prioridades
todavía es hora que no consigo explicarme
cómo acabé metido en la sección de comentarios de la witgenstein x900...
"una puta mierda, no la compres"
decía belinda citrone, de augusta, georgia
"me subí a la witgenstein x900 y anduve recorriendo en ella algunas cuadras de mi barrio;
el viento acariciaba mi rostro y despertaba en mi interior
evocativas y placenteras ensoñaciones de una infancia feliz ya medio olvidada
en que el sexo y sus miserias todavía ni siquiera despuntaban en el horizonte de mi vida;
entonces la llanta delantera se desprendió de la tijera de la puta bicicleta
y yo acabé precipitándome a tierra y despatarrada en la cuneta
enseñando las putas bragas y en medio de las risas y gestos de burla de algunos paseantes"
se lamentaba shirley firestone, de miami, florida
había más de 200 reseñas negativas
y la gran mayoría coincidía en resaltar el mismo defecto:
a la puta bicicleta se le salía la llanta delantera
en cuanto el vehículo alcanzaba las 30 millas por hora
al final no compré la mesita de noche
sino que encargué una witgenstein x900
y luego contraté una cobertura adicional para el seguro de helen
por 200 mil dólares en caso de accidente en vehículo de dos ruedas
"oh, joe, hace tanto que no me subo a una bicicleta
¿crees tú que podré recordar cómo se maneja una cosa de estas?"
"claro, helen, sólo es cuestión de subirte al sillín y dejarte ir,
y no olvides aplicar el freno al final de la cuesta, justo antes de tomar aquella peligrosa curva,
para que no vayas a despeñarte por el profundo barranco de 800 metros que hay más allá"
ahora quizás ya puedan imaginarse por qué le di ⭐⭐⭐⭐⭐ a esta mierda
el único cliente que ha quedado totalmente satisfecho con su compra
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