PENÚLTIMO POEMA
en un semáforo cualquiera
con la luz en rojo
me asalta de pronto
una idea para un poema
y aunque tengo a la mano
papel y lápiz
decido no anotarla
y en vez de hacerlo cojo el botellín de cerveza
que llevo en el portavasos del tablero
y le pego un trago
y veo la luz cambiar al verde
y le doy al gas
y el viento entra por la ventanilla del auto
y me da en la cara
y me siento bien pensando
que en diez minutos más habré llegado a la playa
y me tiraré debajo de una sombrilla
a llenar poco a poco mis venas
de cerveza fría
mientras mi mente se va quedando cada vez más
vacía de toda esa mierda poética
que a estas alturas del partido
sigue todavía sin saberse
para qué coño sirve
Sirve para expresarse, masoquearse o liberarse.
ResponderEliminarSalud con esa cerveza y a disfrutar la vida, que de vez en vez es tan rico no pensar en nada, no?
Cariños
mar