poeta romántico y sentimental
lunes, 18 de febrero de 2013
mi príncipe azul me rompió el culo
dejé de ir con las putas porque conocí a una nena
que aceptó salir conmigo en plan de conocernos
espiritual y emocionalmente con miras a establecer
una relación formal de compromiso católico y apostólico
"tengo 16 años, getulio, y un chochito nuevo y sin estrenar"
yo me imaginé aquel chochito con sus aromáticos pliegues
fruncidos allá abajo entre sus piernas, y la boca
me empezó a babear como le babea a un perro
el hocico al pasar delante de una carnicería
la primera semana salimos al parque y estuvimos
un par de horas sentados en una banca mirando
las bellas flores alrededor y la luna que asomó
a lo lejos sobre el horizonte, y más tarde
algunas estrellas cuya contemplación ciertamente
nos provocó una fuerte emoción espiritual y católica y apostólica
"el chochito está reservado para aquel hombre
de noble talante que logre compenetrarse conmigo
en el amor y la pureza del alma bondadosa en jesucristo amén"
la segunda semana rentamos un bote y paseamos
por el lago al atardecer admirando el juego
de la luz crepuscular sobre la superficie del agua
rizada por acción del viento, y hablamos de la melancolía
y la tristeza de los poetas mientras nos mirábamos
tierna y católica y santificadamente a los ojos
"el chochito será entregado en ofrenda mística
a ese romántico caballero que pueda ver en mí
algo más que un simple cuerpo dotado
de ciertos atributos físicos perecederos"
la tercera semana fuimos de excursión al bosque
y bebimos vino a la sombra de un álamo evocando
con nostalgia y languidez aquel maravilloso tiempo
donde hombres y mujeres convivían afectuosamente como hermanos
en el seno de la naturaleza y regocijaban sus virtuosos cuerpos
en placeres tan inocentes y sencillos como podía ser
jugar a las escondidas entre los matorrales
"el chochito fungirá como el puente mágico a través del cual
caminaré tomada de la mano del príncipe de mis sueños
rumbo a la tierra esplendorosa del amor y la bondad
y la misericordia por los siglos de los siglos amén"
la cuarta semana ella quiso volver al puto parque a sentarse
en aquella puta banca a mirar aquellas putas flores y hablar
del puto amor y la puta magia del sentimiento y bla bla bla
pero yo manejé hasta salir de la ciudad y la llevé a un hotel de putas
donde le hice ver cuán equivocada había estado siempre
respecto a la clase de persona a quien le estaba deparado
en realidad aquel fabuloso chochito en su entrepierna:
¡cerdo degenerado hijo de puta, me dejaste el coño hecho una mierda!
Publicado por getulio roncesvalles
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