Mal
verbo
El amor, dura
roca
¿Quien saca
jugo a esa piedra tiesa?
Todos quieren
beber, jamás podrán
Y yo quiero,
quiero ese dulce néctar
Costoso labor es. Sufro, lloro, muero en mi silencio
Atrévete a dejarme
sola
Hazme tuya una vez más
Eres mío como nunca antes lo fuiste
Siénteme. Te beso despacio al alba y en letargos libo
¿A dónde ir? ¿Por
dónde caminar?
Si todo
Lleva a tus
jardines
Enraizados recuerdos
Hiriente maleza
Mi rosa te pertenece y otro desea cortar de lejos
Ella te tiene tan
cerca...
Cuanto duele este
amor que comienza
Siendo solo mío, nunca
fue de dos
Al menos no nuestro
Onírica pluralidad
Quien diría que
muero
Pos un falso verbo
de amor
♥
Gabriela
Qué bonito y cargado de energía.
ResponderEliminarFelicidades.
ResponderEliminarGabriela,precioso poema, que suerte tenerte aquí. Besos.
Una mierda el poema. Hay que putear de lo lindo para que guste. Esa energía tiene. Bronca me da que en la cuna del castellano sean tan ordinarios para escribir. Demasiado naif lo que escribo realmente.
ResponderEliminarGabriela, el poema es bueno, a pesar de lo que piensas de nuestros comentarios jajaja . Y no tengas tan mal genio, que para mall genio el mio, y a loca no me ganas jajaja
ResponderEliminarNo entiendo tu enfado, Gabriela. Ser ordinarios...No somos catedráticos ni licenciados todos, más bien somos gente normal, de los barrios, pueblos, periferias...Ordinarios. Me gusta ser ordinario sin caer en insultos.
ResponderEliminarEscribir, por suerte, es algo universal, todos podemos expresar nuestras inquietudes, temores y alegrías escribiendo sin necesidad de ser célebres conocedores del lenguaje. No pongamos límites a la creatividad, ni la asociemos a grupos elitistas.
Y vale, todos los textos, por muy pobres que sean, siempre tienen un mensaje muy definido, muchas veces el mensaje es más importante que el contenido.
Un Haiku para pensar (forma poética japonesa), "mal construida y sin rigor silábico (número de moras por verso)"
Al ladrón se le
olvidó la luna
en la ventana.
Aún siendo simple, su mensaje es abrumador.
Miguel Ángel:
EliminarComo sabrás cada país utiliza los vocablos de diferentes maneras. Ordinario se utiliza aquí como soez y no se porque te calzas el saco si no lo decía por vos que sos uno de los pocos que escribe aquí sin llegar al recurso de lo burdo. ¿Decime como se llama la poesía en la que polla, puta, puto y todas las palabrotas que se te ocurran abundan? Porque en todos los años que escribo y leo (que son muchos) no lo he visto. Una cosa es la poesía erótica y la aplaudo y otra muy diferente es esa forma de escritura que puede ser graciosa una vez pero que con el correr del tiempo cansa. No soy elitista ni nado en plata, he pasado hambre porque aquí también hay y hubo crisis aunque del otro lado les importe poco, se lo que es la pobreza "sudaca" diran por allá y ser pobre, te lo aseguro, no es sinónimo de mal educado, ni mal aprendido. He dicho
Saludos
Gabriela. No me he dado por aludido en tu comentario, hablo generalizando, no en primera persona. Y bueno, este blog tiene algo especial, lo hace especial que sean varias personas las que publican. Cada texto está escrito desde lo más íntimo del inconsciente, nos demos cuenta o no. Nos ponemos en el lugar del autor durante la lectura y siempre encontraremos paralelismos en nosotros mismos, se utilicen unas palabras u otras.
EliminarCuando hablo de "élites" tampoco me refiero a ti, creo que se entiende. Lo de "sudaca", bueno, esa palabra fue difundida e inventada por la extrema derecha, te puedo asegurar que no es una palabra muy común ni generalizada entre españoles. No podemos encasillar a una sociedad por el comportamiento de una minoría fascista.
Y me gustó mucho este poema, tiene energía. Además, es un poema, yo escribo otras cosas.
Aquí tienes amigos. Un abrazo.
ResponderEliminarGabriela, aquí hay libertad de expresión, y podemos decir lo que nos salga del coño o de los cojones, a mí coño y cojones no me parecen vocablos feos, es más me parecen muy poéticos.
VIVA LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN!!!!
Saludos y no te enfades, acostúmbrate a la libertad, y a respetar a los demás.