the power of love

no todos los días son malos
de ayer, por ejemplo, no puedo quejarme
me desperté alrededor de las 11 y sin resaca
había sol y la temperatura rondaba los 30 grados
entonces decidí bajar a la playa y tumbarme un rato en la arena
subí al carro y manejé al ultramarino para comprar
una docena de latas de cerveza y unos marlboro
en el expositor de novedades literarias
vi que tenían el último bestseller mundial de paulo cuello
-más de 5 millones vendidos en menos de una semana-
"el hombre que voló a las estrellas en alas del amor"
la biografía novelada de un oscuro profeta musulmán del siglo 7
condenado a morir colgado de los huevos
por haber predicho que ningún equipo de futbol turco ganaría nunca la champions;
en la compra de un ejemplar
te regalaban "las profecías del santo sepulcro de constantinopla"
-única obra escrita por el ya mencionado profeta-
tomé un paquete y lo añadí al carrito
diez minutos más tarde me encontré por fin
tumbado en la arena a la sombra de una palmera
me había tomado un par de cervezas y me sentía de puta madre
cogí el librito de las profecías y le eché un vistazo
"... escritas en el año 666 después de cristo
por abdul hazan haladmelin -un ermitaño enloquecido originario del cáucaso-
predicen con exactitud matemática los diez eventos más importantes
de cada año a partir de la muerte de su autor"
oh, vaya, muy bien, pensé
veamos qué mierda predijo este pendejo para el 2016:
"1- un hijo de puta obtendrá la presidencia en ee uu;
2- un hijo de puta morirá en el caribe
y cuba por fin será libre;
3- un pedrusco espacial de diez metros de diámetro
caerá del cielo el 30 de noviembre, a las 2 45 p.m. hora local
sobre el grupito de palmeras de la playa "las canoas", a las afueras de manzanillo
(sí, justo la playa donde yo me hallaba en ese momento)
y dejará hecho mierda a todo aquel hijo de puta que se encuentre allí debajo"
levanté la vista del libro y miré hacia el cielo
el astro rey brillaba esplendoroso en medio del infinito azul
una gaviota solitaria planeaba indolentemente a mil metros de altura
miré la hora en el puto celular: 2 41 p.m.
arrojé las profecías de haladmelin a un lado de la hielera
y metí la mano en ella y agarré la tercera cerveza
"estos pendejos ya no saben qué mierda inventar" pensé
luego me empiné la cerveza y me levanté
cogí la hielera, los marlboro y mi botecito de banana boat spf 150
y me alejé caminando de allí en dirección al aparcamiento;
subí al carro, lo encendí y metí primera
y antes de arrancar rumbo a la salida
miré por la ventanilla hacia el cielo y pude ver
el enorme pedrusco predicho por haladmelin precipitándose a tierra

"gracias, paulo cuello, por haber salvado mi vida de nuevo"