sábado, 1 de noviembre de 2014

JOSE VILLA

EL ÚLTIMO POEMA QUE TE ESCRIBO

la  de animal saciado
que tienes en esa foto
del facebook que hace un par de días
subió el cabrón con el que has 
saliendo desde hace ya unos meses
-tú y él con las  juntas mirando al frente-
me hace imaginar cada vez que la veo
-y vuelvo a percibir la vasta languidez
que se extiende por la anchura de tu cara-
los salvajes gruñidos que emitirás cada 
tumbada en alguna cama con las  al aire
más abiertas aún que el horizonte de un mediodía de abril
mientras su  se fusiona a tu entraña hecha agua;
los aullidos de perra infinitamente traspasada
rasgando estrangulados la atmósfera de una lluviosa madrugada
entre las sucias paredes de algún cuarto de hotel de putas;
¿el sí tiene para darte lo que yo no tuve?
¿él sí conoce las palabras mágicas que yo nunca encontré
para hacerte olvidar por un instante tus aniñados remilgos
y convencerte de las ventajas de que te le pongas de culo?
una vez, al principio de conocernos
me dijiste que tú habrías sido inmensamente feliz
en caso de que te hubiese sido posible haber seguido siendo
por siempre una despreocupada niña de 12 años;
¿dirías lo mismo ahora todavía?
por la  que tienes en la susodicha foto
yo apostaría los huevos a que ahora más bien al contrario
te lamentarías quizá de no haber empezado
a subirte al jodido plátano ya desde esa edad
¡lástima que  que estuviste conmigo no lo usaras
más que en andar buscando pretextos para no aflojarme el culo!
cuando no una puta tarea, un puto compromiso social
cuando no una puta reunión , una puta reunión de 
¿cómo hizo tu  amigo para conseguir que dejaras a un lado
todas esas putas pendejadas en que repartías tu vida?
¿acaso habrá logrado el hijoputa encontrarte el punto "g"?
como haya sido, felicítalo de mi parte
viéndolo bien, no son muchos los que pueden presumir
de estarse cogiendo y lograr provocarle cada 
media docena de orgasmos a la  que alguna vez
mantuvo durante meses al mejor poeta pornográfico y masturbatorio de jalisco
escribiéndole pendejos y cursis poemas al amor de su 

(si por cada puto poema le hubiera echado mejor una cogida...)


CUANDO VOLVAMOS A VERNOS

cuando volvamos a vernos
(si es que volvemos a vernos)
sé que voy a quedarme de pronto sin palabras
y tal vez helado
y tieso como si hubiera visto
un fantasma
y que tú sonreirás
y ladearás ligeramente la  
como si la acomodaras para contemplarme mejor
o qué sé yo
y no tendrás ningún  para soltarme
una de tus bien aprendidas y perfeccionadas
durante años
educadas frases de cortesía apropiadas
para ser pronunciadas en caso
de un "inesperado encuentro no deseado
con algún antiguo amor"
y que pondrás una  como de felicidad
o inmensa satisfacción por verme
y ensancharás aun más tu  hasta dejar
al descubierto todos los 
y me dirás que me veo bien
que estoy más delgado, que estoy más joven
putas mentiras 
y que parezco feliz 
puto embuste
sí, claro, te responderé yo
y al mismo tiempo estaré pensando "tú estás
más fea y ya empiezas a acusar recibo
de que pronto cumplirás los 30 y parece
como si volvieras a necesitar ortodoncia, 
se te están torciendo los putos dientes de tanto
que se la chupas al hijo de puta con el que
ahora vives y por quien me cambiaste, perra"
e inclinaré la cabeza y rozaré ligeramente
tu cara con mis  secos para no desentonar
con el protocolo
y entonces mi nariz, como una herida abierta
por la que se colara traicioneramente el agente patógeno
de un virus en la sangre
volverá a verse invadida de golpe por los maravillosos efluvios
que despide tu  y que enseguida
harán revivir en la parte más recóndita de mi cabeza
sensaciones que yo creía ya extintas, tal vez
incluso un último aletargado átomo
del amor que te tuve
así que no tendré más remedio
por simple instinto de supervivencia y aun a riesgo
de que me tomes por un puto cerdo maleducado
no me quedará más opción que interrumpir bruscamente
mi participación en esa burda  del reencuentro amistoso
de dos ahora ya perfectos extraños que sin embargo
en tiempos habrían estado tan unidos
y renunciaré a abrazarte como corresponde hacerlo
al encontrarse uno pasado el tiempo de nuevo
con la gente que en el pasado significó algo en la propia 
y me echaré hacia atrás 
y me alejaré de ti como si apestaras o tuvieras
la lepra
murmurando apenas precipitadamente 
alguna trivial frasecita 
de despedida
y me daré luego prisa en poner
toda la tierra de por medio posible
entre la jodida y amarga y estúpida 
y oscura y alcoholizada y llena de putas noches sin dormir
vida que vivo ahora
y tu sonrisa
ese ya inútil recordatorio de que alguna vez 
yo quizás pude haber sido

¿feliz?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...