llega y cierra la puerta de un portazo

se detiene frente al espejo que está a un lado
se acomoda el pelo
grita ¿estás ahí, pendejo?
le respondo ¿qué te importa, perra?
se da la vuelta y camina hacia la sala
el taconeo de sus zapatos resuena en todo el piso
le doy un trago a mi cerveza
viste la minifalda que más me calienta
-la de licra entallada al culo-
se acerca al sillón y me mira desde arriba
¿saliste a buscar trabajo, baboso,
o ni siquiera te moviste del puto sillón en toda la mañana?
¡vete a chingar a tu madre, estúpida, le digo
yo hago lo que me sale de los huevos!
en la tele pasan anuncios
se sienta en la mesita a un lado del sillón
coge mi cerveza y se empina de un trago lo que queda 
las bragas le asoman bajo la falda
se me empieza a endurecer el pito
cambio de canal por hacer algo
¡eres un puto huevón de mierda, villa!
debajo del tono de enfado se adivina un gran cansancio
¿conseguiste el préstamo? le pregunto
la cerveza que te tomaste era la última
me mira con ojos llenos de hastío
esa mirada de los que llegan al fin de algo y se preguntan
cómo será posible vivir después de eso
el cabrón me puso una condición, dice ella
y no me quedó más remedio que aceptarla
abre su bolso y saca un pequeño fajo de billetes
mil pesos cuando mucho
-apenas para una semana de comida y cerveza-
baja a la tienda y compra más cerveza, le digo
ya sabes, para celebrar
¿no quieres saber lo que tuve que hacer, villa
para conseguir que me dieran esta mierda?
me encojo de hombros y desvío la mirada
ella se levanta y se para frente al sillón
se echa el pelo hacia atrás y se lo anuda
se pone de rodillas entre mis piernas
su cabeza se hunde en mi bragueta
en la tele pasan ahora los mejores goles de la semana
ronaldo metió uno de tiro libre a 30 metros del arco
messi burló a 5 y fusiló al portero
el número uno de la semana 
-ese cabrón de messi debe ser hijo de superman-
ella levanta la cara de mi bragueta
escupe el semen al piso antes de coger su bolsa
se da la vuelta y echa a andar hacia la puerta
¡fíjate que las cervezas estén bien heladas, le digo
y pregúntale al de la tienda si no hay alguna forma
de que te cancele una parte de mi cuenta!
vuelve a dar un portazo al irse
sabe lo mucho que eso me encabrona 
incluso le he dicho que cualquier día de estos
voy a largarme si vuelve a azotar la puerta 
es obvio que lo sigue haciendo sin embargo
por oscuras razones antediluvianas asentadas
en lo más profundo de su incomprensible psique:
nunca esperes del comportamiento de una mujer
ningún acto que tenga un mínimo de lógica