El teatro de la vida.

 En el teatro de la vida acada uno le toca un papel, el que ha elegido, el que siendo espíritu eligió, asi que..... Apechuguemos con lo que hay, y si no te gusta la próxima vez elígete otro mejor, aunque todos los papeles tienen su parte buena y su parte mala, no hay ninguno bueno y malo al cien por cien. Lo peor siempre es la muerte, salvo para los muy elevados espiritualmente .que entienden la muerte como un cambio de vestimenta y de papel. No nos enseñan a morir, nos educan para vivir y consumir pero en una ilusión ficticia de felicidad material y placeres carnales, el tránsito por la vida es corto , o largo pero siempre el suficiente para aprender la lección, la lección de que vinimos sin nada y sin nada nos iremos, trajimos conciencia y conciencia más elevada y sabia nos llevaremos de este viaje terrenal, después de pasar mil y unas experiencias, o pocas,  pero intensas y esclarecedoras, para comprender el alma humana un poco mejor. Y con eso nos iremos para allá, aquí se quedarán los pisos, las hipotecas, el coche, el rolex, l@s amantes, los libros, el plasma, el ordenador, el vecino del quinto, los políticos chorizos, esos nos sobreviven siempre, y si habeís dejado algo pendiente e importante por hacer, hasta puede que volvaís a reencarnaros en el mismo lugar, aunque me temo que el vecino del quinto ya no será el mismo.