domingo, 22 de julio de 2018

psicólogo especialista en perrología


había un perro en el parque
montado a una perra, no lejos
de la banca donde yo estaba sentado

la perra se mantenía quieta
afianzadas las cuatro patas en la vereda
la mirada un tanto desenfocada le
daba un aire ausente como si
lo que estuviera ocurriendo tras ella no fuese
mucho de su incumbencia que digamos

su expresión distante me llevó a pensar
que quizás estaría barajando
una serie de pretextos para contar al marido
cuando volviera a casa, ya cepillada a fondo
enfriada, blandengue, medio contrita

entré a curiosear a un solar baldío -diría-
me persiguieron los de la antirrábica
me encontré con cuquis, ha vuelto
a divorciarse, ahora vive con un bulldog;
se colapsó el tráfico, marchaban los del puto
orgullo lgtbxyz, (¿de qué vivirán si no hacen
otra cosa más que marchar?)

hubo junta en la escuela de los niños

acompañé a mi madre al doctor,
le tienen que sacar la matriz, la pobre
tendrá que posponer el viaje a egipto
se sintió mal y la llevé a casa
me dijo que no era quedarse hueca
lo que más le dolía sino los 80 mil gastados
en ponerse tetas el año pasado

la batería del celular se descargó

me da igual si me crees o no, cabrón
no voy a seguirte el juego ¿sabes?
estoy cansada, me duele la cabeza
si quieres cenar tendrás que prepararte
tú mismo la puta cena

el perro trepado en ella por fin alcanzó
el punto álgido de la cópula perruna;
se dio la vuelta y esperó que la verga
se le encogiera para poder desengancharse
de aquel cuerpo que ya no le causaba
más que una profunda indiferencia y quizás
cierto enfado ante la perspectiva de pasar
ese tiempo muerto allí prendido

"todo estaría de puta madre -pensaría él-
si no fuera por estos jodidos minutos
enchufados por el culo como garrapatas
a qué pendejo se le habrá ocurrido
la mecánica de la fornicación cuadrúpeda
menos mal que la chica no es de esas
neuróticas que no soportan

el silencio poscoito y te empiezan a preguntar
si vives por el barrio y con cuánta frecuencia
vienes al parque y cuál es tu puto cantante
favorito y los viernes qué haces y hasta te piden
el número de celular o el facebook como si
el hecho de haberse dejado montar supusiera
algo ajeno a un calentón y llevara
a las puertas de una relación formal o algo
por el estilo y no simplemente a librarse
de la jodida brama y si te he visto ya
ni me acuerdo"

al cabo de unos diez minutos se zafaron
y la perra atravesó la vereda y desapareció por un boquete
abierto en el seto que flanqueaba un cuadrilátero
cubierto de césped y el perro
enfiló en dirección opuesta trotando a buen paso
a lo largo del sendero hasta alcanzar una curva y
perderse de vista

poco más tarde comenzó a llover y yo también me fui de allí













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